El ciclón categoría 4 provocó daños en hospitales e infraestructura, mientras reaseguradoras monitorean posibles reclamaciones
SAN JUAN – El huracán Melissa, que bajó a categoría 4 tras tocar tierra en Jamaica, provocó daños en seis hospitales, cortes eléctricos, carreteras inundadas y caída de árboles, según datos preliminares ofrecidos por las autoridades locales.
Los efectos del ciclón, que llegó a la isla con vientos de hasta 295 kilómetros por hora antes de debilitarse, han afectado la infraestructura pública y médica. Entre las instituciones impactadas se encuentran el Hospital Infantil Bustamante en Kingston, cuyo acceso quedó bloqueado tras la caída de un poste eléctrico, y el Hospital General Público Savanna-la-Mar, en Westmoreland, donde los vientos arrancaron parte del techo.
El ministro de Salud y Bienestar, Christopher Tufton, informó además que los hospitales Noel Holmes, Black River, Cornwall Regional y Falmouth también sufrieron daños. El Ministerio indicó que trabaja junto a la Autoridad Sanitaria Regional del Sur y los servicios de emergencia para restablecer operaciones.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) mantiene la categoría 4 del sistema y las alertas por vientos, lluvias e inundaciones repentinas. El Gobierno estima que más de 50,000 personas podrían ser desplazadas, mientras el ministro de Turismo, Edmund Bartlett, confirmó que hay unos 25,000 turistas en la isla bajo supervisión de las autoridades locales.
De acuerdo con informes del sector, el huracán Melissa ha activado el bono catastrófico de Jamaica, valorado en $150 millones y estructurado con el apoyo del Banco Mundial. Este instrumento transfiere parte del riesgo de huracanes a inversionistas internacionales, ofreciendo liquidez inmediata al gobierno ante eventos de gran magnitud.
El pago del bono se considera un mecanismo clave dentro del marco de financiamiento de riesgos del país, que también incluye seguros paramétricos y créditos contingentes. Si bien los daños económicos se calculan en varios miles de millones de dólares, las pérdidas aseguradas serán limitadas debido a la baja penetración del seguro residencial en la isla, donde solo una fracción de las propiedades cuenta con cobertura.
Las reaseguradoras internacionales monitorean el evento, dado que la mayor parte del riesgo catastrófico de Jamaica y del Caribe se encuentra transferido a través de contratos de reaseguro y mecanismos multilaterales.
Hasta el momento, al menos nueve personas han muerto en el Caribe a causa de los efectos del huracán: tres en Jamaica, tres en Haití, dos en Panamá y una en República Dominicana.


 
  
  
  
 







 
 












