San Juan, Puerto Rico – El aumento en la temperatura de la superficie marítima debido al cambio climático ha desencadenado una serie de efectos devastadores en el noreste del Caribe, donde los huracanes se están volviendo más frecuentes y más intensos. Este fenómeno representa una seria amenaza para los arrecifes de coral en peligro de extinción y para la sostenibilidad de los ecosistemas marinos en la región.
Según un estudio reciente publicado en colaboración por el Programa de Estudios Interdisciplinarios de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad de Puerto Rico, el Centro para la Ecología y Conservación Tropical Aplicada y la Sociedad Ambiente Marino (SAM), los huracanes de categoría cinco Irma y María causaron daños sin precedentes a los sistemas de arrecifes en todo el noreste de Puerto Rico en 2017.
Estos huracanes ocasionaron impactos históricos en especies de corales en peligro de extinción, con daño mecánico sustancial y extenso a especies ramificadas, así como daño moderado a alto a los morfotipos incrustantes de pequeño tamaño y masivos debido al arrastre de sedimentos y entierro por escombros. Por ejemplo, se observó un descenso del 35% en la población de Acropora palmata y un alarmante 96% en la de Dendrogyra cylindrus.
Con la continua intensificación de los huracanes debido al cambio climático, se prevé que estos fenómenos representen una amenaza aún mayor para la conservación de los arrecifes, la biodiversidad y el equilibrio ecológico de la región. Por lo tanto, se hace necesario optimizar las estrategias de propagación y restauración de coral, así como implementar enfoques de gestión adaptativa basados en ecosistemas.
Para contrarrestar los efectos del cambio climático y proteger los arrecifes de coral, se requiere la implementación urgente de medidas de conservación que incluyan la protección de los arrecifes, la reducción de las emisiones de gases, prácticas de pesca sostenible y programas de restauración ecológica a gran escala, según lo mencionado por el Dr. Edwin A. Hernández, Científico Senior de SAM.
El estudio concluye que es crucial implementar esfuerzos sostenidos de propagación y rehabilitación de coral para apoyar la recuperación de arrecifes, especialmente para especies vulnerables. La restauración estratégica de poblaciones y hábitats dañados es fundamental para impulsar los inventarios reproductivos de las especies y promover la resiliencia contra futuros huracanes.
En resumen, la protección de los arrecifes de coral en el Caribe requiere un enfoque integral y colaborativo que aborde tanto las causas del cambio climático como las estrategias de restauración de ecosistemas marinos, con el objetivo de preservar estos valiosos ecosistemas para las generaciones futuras.