Por Triple S
24 de enero de 2022– La Fundación Triple-S aporta a seis iniciativas distribuidas alrededor de todo Puerto Rico para atender a poblaciones vulnerables de escasos recursos económicos, que viven solos, padecen de condiciones crónicas y necesitan apoyo para tener su seguridad alimentaria y bienestar emocional.
La inversión social de Fundación Triple S es de aproximadamente $150,000 y se canaliza a través de un grupo de organizaciones sin fines de lucro que cuentan con experiencia atendiendo los problemas sociales de nuestro país. “Tras realizar la primera invitación formal de propuestas en el último trimestre de 2021, la Fundación Triple-S seleccionó los proyectos priorizando en su enfoque en poblaciones vulnerables, la atención a la inseguridad alimentaria, la soledad y el aislamiento social, por ser agravantes para la salud integral de las personas.
Le dimos gran valor también a la capacidad demostrada por estas organizaciones para medir el impacto de sus esfuerzos y entrelazar la inseguridad alimentaria con atención al aislamiento social. Nos preocupa que estos factores se hayan empeorado durante la pandemia. Buscamos encaminar iniciativas que promuevan la salud física, emocional y fortalezcan las conexiones sociales y comunitarias”, dijo Lydia Figueroa, directora ejecutiva de la Fundación Triple[1]S.
Los proyectos seleccionados son como siguen:
· Esperanza para la Vejez: Esta organización creada en 1966 para atender la necesidad de adultos mayores de bajos ingresos estará trabajando en un proyecto piloto para atender las necesidades de conexión social y combatir la soledad de decenas de adultos mayores con condiciones crónicas en una comunidad en Bayamón.
· Fundación de Investigación Ciencia y Educación: Este proyecto combina la investigación con una iniciativa para atender la seguridad alimentaria y la soledad entre adultos mayores. Distribuye la Cajita Mutua, alimentos frescos producidos por la organización sin fines de lucro COSSAO de Utuado. Atenderán residentes de los municipios de Loíza y San Juan. Es un proyecto colaborativo en el cual participa la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard y como parte del proyecto se estudian las tendencias en las enfermedades crónicas, psicosociales y ambientales.
· Nuestra Escuela: Su proyecto busca crear espacios de compartir saberes, participación ciudadana y conexión social. Es un proyecto piloto que promueve un junte generacional entre jóvenes estudiantes de su escuela alternativa y un grupo de adultos mayores que viven solos en el municipio de Caguas
· Proyecto Plenitud: Esta entidad promueve la sostenibilidad, la agricultura ecológica y otros servicios adaptados a las necesidades de los residentes de la zona oeste, en particular en Las Marías y Maricao. El primero tiene una de las tasas más alta de diabetes en Puerto Rico y el segundo tiene el nivel más alto de pobreza. La iniciativa Amo mis Abus les proveerá comida caliente y atención médica a adultos mayores con condiciones crónicas y que no cuentan con recursos de apoyo y viven en soledad.
· Prymed: Es un centro de salud 330, el respaldo de la Fundación es para el Proyecto Mesa que fomenta la salud nutricional, con estrategias educativas para promover hábitos alimentarios y estilos de vida saludable y distribuye una cesta de alimentos entre 900 adultos mayores.
· Waves Ahead: Se enfoca en proveer servicios de apoyo emocional, acompañamiento y distribución de alimentos a los adultos mayores que forman parte de la comunidad LGBT+ y son altamente vulnerables al discrimen, la poca atención médica y la soledad.
“En Fundación Triple S nos sentimos honrados de patrocinar estos proyectos que nos ayudan a promover nuestra misión de habilitar vidas largas y saludables, a la vez que reducimos las inequidades en la salud”, dijo la directora ejecutiva de la Fundación Triple-S, quien a su vez sirve de enlace comunitario para Triple-S.
Sobre la Fundación Triple-S La Fundación Triple-S se estableció en 2017, justo después del Huracán María, para canalizar fondos de respuesta a la emergencia. En abril de 2019, dirigió su trabajo a atender los determinantes sociales de la salud con enfoque en seguridad alimentaria y bienestar emocional.