Miami (EFE) – Florida se halla este jueves entregada a las tareas de rescate y recuperación de las zonas más golpeadas por Idalia, que entró el miércoles como un huracán de categoría 3 por el noroeste de este estado, siguió luego por el sureste de EE.UU. y está ahora sobre el Atlántico convertida como un ciclón sin características tropicales.
Idalia tocó tierra a primeras horas del miércoles y con vientos sostenidos de 125 millas por hora (201 km/h) en Keaton Beach, en el «Big Bend» de Florida, un área predominante rural y que sufrió un «daño significativo», según ha afirmado este jueves en una rueda de prensa el gobernador estatal, Ron DeSantis.
Acompañado de la administradora de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés), Deanne Criswell, el gobernador ha informado que por el momento no hay muertos a causa de Idalia, si bien la Patrulla de Carreteras de Florida ha dicho el jueves que el ciclón fue la causa indirecta de los decesos de dos personas que conducían en medio de «extremas» condiciones climáticas.
En respuesta a un pedido del gobernador, el presidente de EE.UU., Joe Biden, ha emitido hoy una declaración de desastre mayor para los siete condados más golpeados por el huracán y con la que destina más fondos dirigidos al levantamiento de albergues para los damnificados. En el transcurso de una visita sorpresa que hizo este jueves a la sede de FEMA en Washington, el mandatario anunció que el sábado viajará a Florida para evaluar los daños.
Los equipos de emergencia estatales habían logrado rescatar a unas 40 personas que estaban atrapadas en casas o zonas inundadas, según ha revelado DeSantis, mientras que Criswell ha manifestado que la prioridad inmediata es asegurar que nadie quede atrapado en ninguna de las comunidades afectadas.
La administradora de FEMA y DeSantis recorrieron este jueves las áreas más afectadas, si bien las primeras evaluaciones indican que el daño causado por Idalia es menor del que hace casi un año produjo el poderoso huracán Ian, que también entró por la costa oeste de Florida y fue el responsable de casi 150 muertes y millonarias pérdidas.
Un informe preliminar de Moody’s Analytics cifra entre $12,000 y $20,000 millones las pérdidas por daños y producción mermada a causa de Idalia, una cifra por debajo de los $112,900 millones que supuso Ian, según estimaciones del Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) de EE.UU..
«Ian fue diferente, veías botes que volaron varias yardas. En este caso, aunque definitivamente hay destrucción, por ahora mayormente se observan grandes cantidades de escombros y madera, ya que es una zona rural», ha comentado DeSantis.
RESTAURACIÓN DE ENERGÍA Y REMOCIÓN DE ESCOMBROS
La atención de las autoridades estatales y federales está este jueves en el «Big Bend», la zona de mayor impacto y donde se concentran las más de 107,000 viviendas e inmuebles que se hallan todavía sin energía, de acuerdo a la web especializada PowerOutage.us.
DeSantis ha aseverado que ya se ha restablecido el suministro a unos 420,000 clientes que perdieron energía a causa de Idalia y unos 40,000 operarios se encuentran sobre el terreno para continuar reparando o reemplazando los postes de tendido eléctrico dañados.
Si bien la poblada bahía de Tampa ha evitado lo peor del ciclón, continúan apareciendo este jueves imágenes de las devastadoras inundaciones causadas por la marejada ciclónica que trajo consigo Idalia, que en Cedar Key, al norte de la ciudad de Tampa, ha marcado un registro histórico: el mar se elevó hasta casi 2.4 metros por encima de su nivel normal, según datos preliminares.
Cadenas de televisión y medios locales de esta pequeña localidad ribereña del golfo de México hablan de inundaciones históricas y muestran imágenes de calles de su centro convertidas en ríos, así como edificios y viviendas anegados.
Un poco más al sur, en el castigado condado de Pasco, hasta unas 6,000 viviendas se han visto dañadas por el ciclón, según ha informado la cadena CNN, que da cuenta además de hasta 150 personas rescatadas en diferentes barrios.
Idalia perdió fuerza tras su paso por Georgia y Carolina del Sur, esta última declarada hoy zona de desastre por el presidente Biden, y esta tarde se transformó en un ciclón pos-tropical, con vientos de 65 millas por hora (100 km/h) y situado sobre el Atlántico, frente a la Costa de Carolina del Norte, de acuerdo al NHC. Ha sentido este jueves los embates de Idalia la costa de Carolina del Norte, donde hasta mediodía de hoy habían 12,500 casas y edificaciones sin energía, pero la cifra se ha reducido a poco más de 2,000.
De acuerdo con el NHC de EE.UU., Idalia seguirá alejándose de la costa de Carolina del Norte y el viernes empezará a fortalecerse de nuevo hasta recobrar la condición de tormenta tropical hacia el sábado, cuando esté cerca de Bermudas, que se halla bajo vigilancia de tormenta tropical. Precisamente, este territorio británico sufrió el miércoles los efectos del fuerte huracán Franklin, un ciclón de larga duración que está produciendo oleaje y resaca en un extenso tramo del litoral atlántico estadounidense.